Hung Huang, el victorioso

Carlos Montemayor, Los poemas de Tsin Pau (2007)

Hung Huan estuvo en la guerra.
El general lo colmó de honores.
Ha limpiado ya en la dura hoja de su espada
la sangre de numerosos combatientes.
Los enemigos eran feroces y perversos.
Defendían sus casas, sus hijos, sus mujeres, sus aldeas.
¿Para qué ensañarse?
Pero bajo su espada cayeron muchos
que aún agonizantes lo maldecían.
Ya es vencedor.
El fuego lo ha tocado y es héroe.
Hung Huan regresa de la guerra,
sí, con otro caballo brioso y joven.
Hoy tiene más hombres bajo su mando.
Aunque el fuego lo hirió, algo no entiende.
Quizás la mirada de aquel niño abrazando
el cadáver del padre ya mutilado.
"La guerra ha acabado", se dice.
Pero en su corazón, como la hierba
seca en la tierra, crece otro silencio.

Imagen relacionada
Han Gan 韓幹, Pastoreo de caballos (Mù mǎ tú 牧馬圖) (siglo VIII)

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