El padre Las Casas lee a Isaías, XIII

José Emilio Pacheco, Islas a la deriva (1976)

Estruendo de multitud en los montes,
como de mucho pueblo.
Y traen los instrumentos de su furor
para borrar del suelo a los opresores.
Y los castigarán por su iniquidad
y harán que cese la arrogancia de los soberbios.
Y ya nadie se ocupará de la plata
ni seguirá codiciando el oro.























Félix Parra, Fray Bartolomé de las Casas (1876)

Comentarios

Entradas populares de este blog

El enemigo generoso

Digamos que Ámsterdam, 1943

El Cardenal Bembo escribe a Lucrecia Borgia